La carrocería de todos los automóviles es la carta de presentación del mismo. Sin importar cuáles sean sus características o su potencia, es importante cuidar de la superficie del vehículo. La corrosión puede aparecer con el paso del tiempo y los diferentes factores climáticos, por lo que es de suma importancia aplicar anticorrosivos automotrices.
La mayoría de las carrocerías están hechas de metal y fibra de vidrio, dependiendo del diseño de cada vehículo. Estas estructuras contienen anticorrosivos desde su fabricación para ofrecer un producto duradero y seguro. Sin embargo, hay zonas de la carrocería que están más o menos expuestas al daño de la corrosión, por lo que a veces es necesario reforzarlas con anticorrosivos automotrices.
Existen diferentes tipos de anticorrosivos automotrices, que pueden variar según su aplicación y la zona en que se aplican. Estos son los más comunes que podrás encontrar:
Recubrimientos
Los recubrimientos, como LINE-X, son productos plásticos que al aplicarse a cualquier superficie, ofrecen una resistencia superior a cualquier ambiente y uso. El recubrimiento de LINE-X puede aplicarse directamente en la carrocería del vehículo y pulirse.
LINE-X no sólo protege la carrocería de la corrosión, sino también de golpes de granizo, piedras, grava, o cualquier agente que provoque daños.
Selladores
Estos productos se utilizan para sellar las uniones entre placas de metal, impidiendo la filtración de líquidos y oxígeno, dos agentes que provocan oxidación y corrosión.
Imprimación
La imprimación es una capa que protege las partes metálicas de la carrocería de la corrosión. Esta se aplica antes de cualquier trabajo de soldadura en puntos de resistencia y antes de las capas de pintura.
Protectores de bajos y antigravillas
Los protectores de bajos y antigravillas cubren la parte baja de la carrocería, como son los guardafangos y el chasis.
A pesar de que existen diferentes opciones en el mercado de anticorrosivos automotrices, el recubrimiento de LINE-X es la mejor opción, ya que puede aplicarse a cualquier superficie y no solo la protege de la corrosión, sino que la cubre con una especie de armadura contra otros agentes dañinos, ¡comprúebalo!